sábado, 30 de octubre de 2010

Anxietas

No sé ni siquiera sobre qué escribir... me bloqueo fácil y se me van "las ganas" de hacerlo o de terminar una idea, últimamente mi vida ha sido de lo mejor, no puedo quejarme todo es siempre felicidad y amor, soy realmente una persona afortunada, soy realmente un bendecido.

En este tiempo he hecho muchos (muchos?) avances en mi enfermedad, en nuestra enfermedad... en cierta forma podría decirse que he crecido muchísimo y con ese crecimiento vinieron cosas que yo no quería recordar, cosas que estaban ocultas en lo más profundo de mí, cosas feas, que me avergüenzan... porque yo creo que tengo mucho de qué arrepentirme, existe mucha putrefacción dentro mío, muchas heridas, mucha mierda. Tomé mi cuerpo y lo destruí completamente, lo marchité sin piedad hasta casi extinguirlo, y todo eso por qué? Por qué?

Siempre me gustó sentir dolor, me hacía sentir vivo en mis peores momentos, pensaba que si tenía que preocuparme por mi sangre fluyendo entonces, no tendría que preocuparme por NADA más, que si terminaba con el estómago doblado de tanto vomitar, de tanto quemarme las entrañas llenas de mierda, si podía por fin expulsar ese dolor entonces quizás, yo sería una mejor persona, algún día, algún día quizás podría levantarme sonriendo y pensando, me espera algo mejor... Me espera algo mejor, pero no... Me esperaba sólo más y más miseria, más mentiras, más odio, más paredes que yo mismo construí para alejarme de los demás y más insomnio... porque odiaba dormir, me odiaba por tener sueño, porque allá era débil, allá te veía todas las noches y todas las noches era lo mismo, tu boca escupiendo mierda, tu brazos sangrando una hemorragia infinita y tu cara de odio, diciéndome, "Me fui... para no verte más, inútil, mierda, si no servís para nada"

Vivi muchos meses pensando que yo había hecho algo para que te mataras, yo mismo me estaba matando en vida por ello, yo mismo estaba torturándome cada vez más profundo por tu culpa, por la falta que me hacía saber qué carajo habías pensado en ese momento... por qué te cagaste tanto en todos? Por qué... por qué, nunca lo sabré.

Porque después de tantas idas y vueltas nos habíamos dado una chance, era nuestro momento así enfermos como estábamos, así zombies como éramos, era nuestro puto momento, y no... tuviste que irte sin siquiera decirme adiós, tuviste que irte para siempre, y de la peor manera.

Pero tranquila, te llevaste una buena parte de mí con vos...

1 comentario: